España ha consolidado su posición como un actor relevante en la investigación del cambio climático, contribuyendo con estudios científicos de alto impacto que ayudan a entender los efectos del calentamiento global y a proponer soluciones sostenibles. En 2024, institutos de investigación, universidades y centros tecnológicos del país han liderado proyectos innovadores que no solo han generado conocimiento local, sino que también han influido en políticas públicas nacionales e internacionales.
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Este año, el enfoque se ha centrado especialmente en el análisis de fenómenos climáticos extremos, la adaptación al cambio climático en zonas vulnerables, la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero y la interacción entre clima, biodiversidad y recursos hídricos. A continuación, repasamos algunos de los hallazgos más relevantes de las investigaciones españolas en 2024.
1. Impacto del cambio climático en eventos meteorológicos extremos
Uno de los temas más urgentes en 2024 fue el estudio de cómo el cambio climático está intensificando los fenómenos meteorológicos extremos en España. Investigadores del Instituto Nacional de Meteorología (AEMET) y del Centro Nacional de Investigaciones Meteorológicas (CIEMAT) publicaron un informe detallado que mostraba un aumento del 30% en la frecuencia de olas de calor desde el año 2000.
Además, se registraron temperaturas récord en varias regiones, incluyendo Andalucía, Extremadura y Cataluña, donde en verano se alcanzaron picos superiores a los 45 °C . Estos datos fueron utilizados para modelar escenarios futuros, concluyendo que sin medidas contundentes de reducción de emisiones, los veranos en el sur de España podrían volverse inhabitables para ciertos grupos de población vulnerable.
También se observó un aumento en la intensidad de lluvias torrenciales, especialmente en el Mediterráneo, vinculado al incremento de la temperatura superficial del mar. Esto se tradujo en eventos como las inundaciones en Murcia o en el Levante español, que causaron daños significativos en infraestructuras y cultivos.
2. Adaptación al cambio climático en zonas costeras
España cuenta con miles de kilómetros de costa, muchas de ellas densamente pobladas y económicamente dependientes del turismo. Investigadores del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y de la Universidad de Cádiz , en colaboración con expertos europeos, realizaron un estudio pionero sobre la erosión costera y el riesgo de inundaciones por el ascenso del nivel del mar.
Entre los hallazgos más destacados:
- El nivel medio del mar en el Mediterráneo aumentó entre 3 y 5 mm anuales durante la última década.
- Se identificaron más de 100 puntos críticos en el litoral español que requieren intervención urgente para evitar pérdidas económicas y sociales significativas.
- Se propusieron estrategias de «adaptación blanda», como la restauración de dunas, la reforestación de áreas costeras y la planificación urbana inteligente.
Estas conclusiones han servido de base para nuevas normativas de ordenación del territorio y para planes de emergencia climática en municipios costeros.
3. Cambio climático y agricultura: nuevos modelos de resiliencia
La sequía prolongada y la disminución de precipitaciones están afectando gravemente al sector agrícola, uno de los pilares económicos de España. En 2024, científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de la Universidad Politécnica de Madrid desarrollaron un modelo predictivo basado en inteligencia artificial que permite anticipar los efectos del cambio climático en diferentes cultivos.
Este sistema utiliza datos satelitales, modelos climáticos y registros históricos de rendimientos agrícolas para recomendar cambios en el uso del suelo, variedades resistentes a la sequía y sistemas de riego más eficientes.
Algunas de las conclusiones clave:
- La producción de almendra, oliva y uva podría verse afectada negativamente si no se implementan prácticas de regadío sostenible.
- Se promueve la rotación de cultivos y el uso de cubiertas vegetales para mejorar la retención de humedad del suelo.
- Se exploró el potencial del agroforestería como solución integradora entre agricultura y conservación del medio ambiente.
4. Transición energética y descarbonización
El camino hacia una economía baja en carbono fue otro tema central de investigación en 2024. El Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER) y el Instituto IMDEA Energía lideraron proyectos orientados a optimizar el uso de energías renovables y almacenamiento eléctrico.
Destacan:
- Desarrollo de baterías de flujo redox más económicas y duraderas, adecuadas para grandes instalaciones solares y eólicas.
- Mejora de algoritmos para predecir la generación de energía solar y eólica, permitiendo una mejor integración en la red eléctrica nacional.
- Análisis de los beneficios socioeconómicos de la transición energética, demostrando que cada euro invertido en renovables genera hasta tres veces más empleo que en combustibles fósiles.
Estos avances refuerzan el papel de España como líder en energía limpia dentro de Europa, especialmente en fotovoltaica y eólica.
5. Efectos del cambio climático en la biodiversidad
El impacto del calentamiento global en los ecosistemas naturales fue otro área prioritaria de estudio. Equipos del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) y de la Universidad de Granada llevaron a cabo investigaciones sobre cómo el cambio climático está afectando a especies autóctonas y migratorias.
Hallazgos importantes:
- Algunas especies animales, como el rebeco ibérico o el águila imperial, están viendo reducidos sus hábitats naturales debido al aumento de temperatura y la desertificación.
- Hay evidencia de desincronización entre ciclos biológicos: por ejemplo, algunas aves migratorias llegan antes de lo habitual, alterando cadenas tróficas.
- Se observa un aumento de especies invasoras, especialmente en medios acuáticos, facilitado por el calentamiento de ríos y lagos.
Estos estudios subrayan la necesidad de actualizar planes de conservación y crear corredores ecológicos que permitan la movilidad de especies hacia zonas más frescas o elevadas.